SUDOR se presentó por primera vez en la segunda edición del Festival Tono en la Ciudad de México en Mayo del 2024 en el Centro Cultural España. Es una experiencia post-performática dirigida por el coreógrafo Nicolas Poggi, un afterparty que explora un clímax eufórico a través de una puesta en escena que potencia y lleva al límite el voyeurismo, liderada por Giselle Hauscarriaga.
Al ritmo de un set en vivo de música electrónica, cinco cuerpos queer se encuentran desnudos en la pista de baile y entran en un trance extático, conectando con sus estados más primitivos. Reivindicando la fiesta como un espacio de lucha, la pieza aborda cuestiones de identidad y género, deseo y sexualidad.
El diseño escénico consiste en un techo móvil de 3×3 metros suspendido sobre les performers, que al inicio de la pieza se encuentra a gran altura y desciende lentamente a lo largo de la performance hasta quedar muy cerca del suelo. Este descenso es gradual, y en un principio puede percibirse simplemente como un elemento fijo que emite luz.
El concepto central que refuerza este dispositivo es el del voyeurismo: el techo baja hasta tal punto que el público se ve obligado a inclinar la cabeza para poder ver lo que sucede debajo provocando una acción concreta para poder formar parte de la escena.
